Recuerdo que llegue de una larga noche agitada, estaba muy muy cansado, llegue a mi cuarto y me recosté casi instantáneamente, me desvestí poco a poco y fui agarrando postura para dormir, abrace fuertemente mi almohada como todas las noches y me dormí profundamente.

Estaba en un acantilado, mirando fijamente hacia el horizonte, viendo como el sol se alzaba poco a poco y detrás mio se encontraba una silueta conocida, se me hacia familiar cada vez que me acercaba mas a ella, pero no podía distinguir quien era. Dando pasos pequeños me fui acercando y preguntando quien se encontraba allí.

De pronto apareció como si saliera de la espesa niebla en donde nos encontrábamos una hermosa figura, blanca y resplandeciente, tenía una forma única y majestuosa, mientras me acercaba la pude ver claramente... era un unicornio.

Se presentó como un mensajero, pero luego se torno en un protector. El mítico me dijo:

Niño no te acerques más, esta mujer es tu amor, es la voz que te deja respirar, es la niña que te enseño a reír y amar. No te acerques más porque ya no te pertenece, ahora es mía y se irá conmigo porque la necesito, sera una de mis amantes, una de las niñas que me seguirá y se quedará para toda la eternidad junto a mí y mis demás hijos.

Carta a mi amor platónico

Lucero, no te conozco del todo

pero se lo suficiente creo yo.

Para pedirte que seas mi compañera,

mi amiga y mi alegría.

Tus virtudes y tus creencias te hacen lo que eres,

tus problemas y tus actos te hacen como eres

y tu amor y tu sonrisa es lo que mas quiero.

Dime bella mujer en qué y donde andabas?

en donde te encontrabas?

y quien no te ama?

Dime bella mujer que haces cuando no te veo?

si somos amigos sinceros?

si hablas a solas y ríes a escondidas?

si eres egoísta o si eres pacifista?

Perdóname bella mujer!

Por no decírtelo con voz perfecta,

soy cobarde, soy ligero y algo feo.

Soy tan tonto y tan ingenuo,

Soy callado y muy obsceno,

soy pequeño y muy enfermo.

A tu lado mi amor platónico,

no existirían más cartas de papel y tinta,

sólo fotografías tuyas y mías!

Adiós amor platónico.

PD: esto lo escribí cuando el Padre Cesar nos daba una charla de la de la justicia!

Bueno me salí de contexto y me puso a escribir esta cartita!

Solo me falta decir tú!

Me gusta como pintas tus pantalones con el color de tu chalina, hacen un juego hermoso que resalta con tu chaqueta de cuero negro y tus botas sueltas con hebillas a los costados.

Me gustan los gestos que haces al momento de caer en el pesado y hermoso sueño, como es que tu cabeza da dos círculos y caes a cabizbaja en mi hombro, como si en un momento solo importara descansar y a mi solo me importara verte reposar.

Me gusta que me pidas favores, que me hables de forma dulce y delicada, que compartamos gustos musicales, gustos comestibles y gustos por conversar en el momento en que queramos.

Me gusta que me cuentes de ti y saber que en tanto y con que tanto tiempo has soñado con encontrar un lugar donde quedarte y compartir con tus padres, tíos y hermanos!.

Me gusta contarte de mi, de mi sabiduría poco intelectual, pero si más cursi, intima, jocosa y traviesa.

Me gusta verte de lejos, verte dormir, verte caminar, ir conmigo a comer o solo a tomar el carro, por el único camino, mas largo y mas peligroso, solos o acompañados, hablando y conociéndonos más, compartiendo el tiempo y hablando de lo que parezca de interés mutuo.

Que te gusta el café y a mi el helado, que te guste dormir y a mi cantar, que admires al padre y yo al hijo!

Que te gusten los abrazos y a mi las sonrisas, que estés enferma y yo también!

Si nos volvemos a ver, aparecerán muchísimas más cosas para escribir y compartir.

Tal vez chocolate y un rico pastel para degustar.

Tal vez una canción y un bonito lugar para visitar.

Solo me falta decir.... me gustas tú!